Cuatro tácticas de Tiendeo para gran consumo

infoRETAIL.- Con el aumento generalizado de los precios en mente desde hace meses, el 86% de los españoles reconocer estar “altamente preocupado por la inflación”, según revela 'Global State of the Consumer Tracker' elaborado por Deloitte. En este contexto, donde la sensibilidad al precio es muy alta, los consumidores están modificando sus hábitos de consumo y los retailers, en consecuencia, buscando nuevas maneras de incentivarlo.

Las principales enseñas tienen a su disposición algunas armas que les permiten atraer a sus tiendas a unos consumidores mermados por la pérdida de poder adquisitivo. Tiendeo, la plataforma especializada en la digitalización de folletos, ha analizado alguna de estas tácticas antiinflacionistas puestas en práctica por las distintas compañías con el fin de mantener la demanda actual. Son las siguientes: 

1. Shrinkflation. Con la subida de las materias primas y los consiguientes costes, una técnica legal de venta es la shrinkflation o reduflación, que permite a retailers y fabricantes reducir la cantidad de producto manteniendo su embalaje original y su precio: cajas de galletas con menos galletas, porciones de queso de menor gramaje... El cambio, tan sutil que incluso pasa desapercibido por parte del consumidor, tiene el objetivo de mantener la competitividad en tiempos de inflación.

2. Cheapflation. La cheapflation es el fenómeno por el cual ciertos productos se sustituyen por otros más baratos, un cambio de estrategia que sacrifica parte del margen en favor de un incremento en la rotación de ciertas referencias. Con este tipo de técnicas, el gran consumo consigue aumentar la oferta de productos en la categoría y permite a los clientes consumir sus productos favoritos a pesar del incremento de precios.

3. Promociones. Ante una coyuntura en la que existe una gran sensibilidad al precio y donde el poder adquisitivo de los españoles se encuentra comprometido, la promoción se convierte en un ‘arma’ muy eficaz, actuando como gancho y catalizador del consumo por su impacto directo en el ticket de compra. Además, la creciente digitalización del consumidor permite también al retail lanzar promociones más personalizadas en función del tipo de consumidor y los hábitos de consumo.

4. MDD. En caso de inflación, las marcas propias de los retailers son las que tienden a incrementar su demanda. Así, ante un aumento de precios, los consumidores acostumbran a realizar menos compras y optar por aquellos productos que, ofreciendo una calidad y características similares, tengan un precio sensiblemente inferior. “Las marcas propias representan un refugio seguro a los ojos del consumidor, aunque estas últimas semanas, al igual que las grandes marcas, están también subiendo precios”, explica la CEO de Tiendeo, Eva Martín.