Supermercado de Asda en Reino Unido

infoRETAIL.- La fusión anunciada la primavera pasada entre los distribuidores británicos Asda y Sainsbury’s está en peligro. Las autoridades del país han advertido esta mañana en un dictamen provisional, esta operación supone "grandes problemas de competencia" por lo que los protagonistas deberán vender activos o renunciar a la fusión.

Según la Autoridad de Mercados y Competencia (CMA por sus siglas en inglés), “el acuerdo propuesto podría conllevar una peor experiencia en tienda y online para los consumidores mediante precios más altos y reducciones en el rango y calidad de los productos ofrecidos". Además, la entidad reguladora también ha observado riesgos de subida de precios en más de un centenar de sus gasolineras.

En definitiva, la CMA advierte de que la fusión propuesta podría representar "una disminución sustancial de la competencia a nivel nacional y local", particularmente en zonas donde actualmente están presentes las dos cadenas de supermercados. "La opinión actual de la CMA es que, probablemente, sea difícil para las compañías hacer frente a los problemas identificados", indica el dictamen.

La CMA propone a las cadenas rechazar la operación o vender un número significativo de tiendas y otros activos, incluyendo sus marcas propias

"Se trata de dos de los mayores supermercados del Reino Unido", ha comentado el presidente del grupo independiente que ha desarrollado la investigación, Stuart McIntosh, añadiendo que la fusión conllevaría "precios más altos, menos calidad y capacidad de elección y una peor experiencia de compra en Reino Unido".

Para salvar estos escollos, la CMA ha propuesto ambos retailers la venta de un número significativo de tiendas y otros activos, incluyendo desprenderse de la marca Asda o Sainsbury, para recrear la rivalidad perdida con la combinación de ambas cadenas. Las dos cadenas tienen de plazo hasta el 6 de marzo para presentar las medidas que consideren necesarias.

La respuesta de los operadores
Ante esta resolución, las dos empresas minoristas han respondido en un comunicado conjunto que las conclusiones de la CMA "malinterpretan" cómo compran hoy en día los consumidores en Reino Unido, así como el nivel de competitividad en el sector, afirmando que la autoridad "ha cambiado las reglas y su análisis no es consistente con casos comparables".

En este sentido, las dos cadenas de supermercados defienden que su fusión permitiría un ahorro significativo de costes, que supondría una rebaja de los precios de venta. "Estamos sorprendidos de que la CMA haya elegido rechazar la oportunidad de poner dinero directamente en los bolsillos de los clientes, particularmente en estos tiempos de incertidumbre", añaden.

Según la propuesta de Asda y Sainsbury's, la facturación combinada de ambas compañías se situaría en 51.000 millones de libras esterlinas (57.900 millones de euros), según datos registrados en el año 2017.