Camiones de Alimerka

infoRETAIL.- Alimerka ha reducido un 80% sus emisiones en los últimos cinco años. En concreto, la cadena asturiana de distribución alimentaria desarrolla importantes proyectos encaminados a reducir el impacto medioambiental de su actividad en las seis provincias en las que opera.

Según la responsable de Calidad y Medio Ambiente de la compañía, Paula Díaz-Caneja, la compañía “trabaja de manera decidida para reducir el uso de combustibles fósiles, tratando de hacer un reparto más eficiente con nuestra flota de camiones con la planificación de rutas y el aprovechamiento de camiones para logística inversa y retornos, entre numerosas medidas”.

En la actualidad, Alimerka cuenta con una flota de 21 camiones eléctricos, 46 camiones de Gas Natural Licuado y 20 camiones híbridos. Además, dispone de 26 furgonetas eléctricas para sus repartos de última milla. Es la flota más importante de España de estas características y ‘top 5’ de Europa.

Esta estrategia de descarbonización ha sido reconocida también a finales del pasado año con la cuarta estrella Lean&Green, que entrega Aecoc. De esta manera, la cadena de supermercados se ha convertido en la primera y única empresa española en contar con este prestigioso reconocimiento y se adelanta así a los requisitos de la Legislación Europea sobre el Clima, que obligan a una disminución de estas emisiones en al menos un 55% antes de 2030 y aspiran a la neutralidad climática en 2050.

Alimerka ha implementado otras medidas para cuidar del entorno y descarbonizar sus procesos. En 2019, instaló en su centro logístico de Llanera (Asturias) la mayor superficie fotovoltaica del norte de España y actualmente cuenta con 17.500 paneles solares distribuidos en 26 centros. Además, la empresa se encuentra realizando mejoras y renovaciones para mejorar su eficiencia energética, y más del 60% de sus tiendas cuenta con iluminación led de bajo consumo eléctrico.

De igual modo, la pasada primavera la cadena plantó 24.200 árboles autóctonos en un terreno de 22 hectáreas en zonas degradadas por incendios en el concejo de Allande (Asturias) y adecuó dos hectáreas de pastizal para ganadería. Esta medida se suma a la iniciativa desarrollada en 2021 con la plantación del Bosque Alimerka (4,5 hectáreas de especies autóctonas de Teverga y Quirós), en un área de especial relevancia para la conservación del urogallo y el oso pardo.