infoRETAIL.- Heineken España ampliará este año la fábrica que tiene en Madrid para alcanzar una producción de 3,2 millones de hectolitros anuales, lo que representa un incremento del 10% respecto a la producción registrada en 2016, cifrada en 2,9 millones de hectolitros. Entre otras mejoras, contará con nuevos tanques de fermentación y nueva área de envasado para líneas de latas.

La producción actual de la factoría madrileña de Heineken equivale a 175 millones de botellas de 33 centilitros anuales (o, lo que es lo mismo, 800.000 botellas diarias), según ha cuantificado José Miguel González Campos, maestro cervecero de la fábrica.

La unidad productiva que Heineken tiene en Madrid, que celebra durante este 2017 su cincuentenario, es en términos productivos la segunda de la cervecera en España, por detrás de la de Sevilla (4,5 millones de hectolitros anuales) y superando a las de Valencia (2,6 millones) y Jaén (1,2 millones).

Esta fábrica, que promedia 175 empleos, elabora el 45% de la cerveza Heineken que la compañía produce en España. Asimismo, Heineken y Amstel constituyen el 80% de la producción de esta factoría, mientras que un 10% corresponde a Cruzcampo y el 10% restante es para otras variedades-especialidades.

Willem Van Waesberghe
Por otra parte, esta mañana ha visitado la fábrica madrileña de Heineken el maestro cervecero mundial de la marca, Willem Van Waesberghe, quien custodia las cepas originales de Levadura-A, descubierta hace 130 años, con las que se elabora esta cerveza y que implica que sepa exactamente igual en los 192 países en los que se comercializa.

Tras destacar que los responsables de fábrica reciben una formación de 15 años, Waesberghe ha subrayado que las 165 fábricas que Heineken tiene repartidas por todo el mundo elaboran la cerveza siguiendo la misma receta.

Asimismo, también se ha recalcado que los tanques de fermentación de la cerveza de Heineken son horizontales (particularidad en el mundo cervecero), donde permanece 28 días, “el doble que una cerveza normal, para conseguir más maduración y estabilidad”, concluye González Campos.