infoRETAIL.- El magnate ruso Mikhail Fridman, propietario del fondo LetterOne, ha ganado la primera batalla por hacerse con Grupo DIA. Así, la ampliación de capital de 500 millones de euros propuesta por L1 Retail ha sido respaldada mayoritariamente por los accionistas durante la celebración esta mañana de la Junta General, dando así vía libre a su opa sobre la compañía.
La clave para este primer triunfo de Fridman ha estado en la baja participación de los accionistas, ya que el encuentro apenas ha contado con un quorum del 54,3% del capital, cifra que se sitúa por debajo de la media de las últimas juntas, que rondaba el 60%. Con una afluencia tan reducida, LetterOne ha tenido más fácil la aprobación de su propuesta, ya que actualmente posee el 29% del capital de DIA.
A la junta llegaban dos propuestas principales: de un lado la ampliación que proponía el Consejo de Administración actual, y de otro la propuesta de aumento de capital liderada por LetterOne. El encuentro ha tumbado finalmente la oferta del consejo actual y ha respaldado la propuesta de Fridman, dando así continuidad a la opa voluntaria de 0,67 euros por acción.
El Consejo de Administración advierte: "En el momento oportuno, nos pronunciaremos sobre los términos de la opa"
No obstante, la victoria de LetterOne no es definitiva para hacerse con el control de grupo español. El fondo de inversión aún tiene que superar dos trámites más: que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) autorice la opa -ya cuenta con el visto bueno de Bruselas y los reguladores brasileños- y que accionistas con al menos el 35,5% de las participaciones le vendan sus títulos.
L1 Retail ha mostrado su satisfacción por los resultados de la junta general y ha agradecido al resto de accionistas su voto a favor de su acuerdo y plan de rescate integral. La empresa ha anunciado su compromiso a trabajar con rapidez para que el folleto de su opa sea autorizado por la CNMV.
“Nos complace que los accionistas hayan votado a favor del acuerdo y recomendaciones de L1 Retail, abriendo el camino a la opa", ha explicado el socio director de L1 Retail, Stephan DuCharme, quien asegura que trabajarán "intensamente para conseguir la autorización del folleto de la opa por parte de la CNMV con la mayor brevedad posible, para que los accionistas puedan beneficiarse de nuestra oferta".
En este sentido, L1 Retail asegura que seguirá colaborando con el Consejo de Administración de DIA y con todos los stakeholders “para garantizar el éxito de su opa y la viabilidad a largo plazo de la compañía”, tal y como ha informado en un comunicado.
Búsqueda de un acuerdo con los acreedores
“Si bien la opa de L1 Retail no está condicionada a que se llegue a un acuerdo con los acreedores de la compañía, L1 Retail continuará participando de manera equilibrada y justa en la búsqueda de un acuerdo sobre una estructura de capital viable a largo plazo para la compañía”, indica la empresa liderada por Fridman.
“El éxito del plan de transformación de DIA requerirá un fuerte liderazgo, un buen gobierno y una estructura de capital viable a largo plazo, riesgos que L1 Retail está dispuesto a asumir durante la implementación de su plan de transformación a cinco años”, añade el directivo.
“Los accionistas tendrán dos opciones: aceptar la opa de L1 Retail y vender sus acciones a un precio con prima de 0,67 euros por acción o conservar sus acciones y aceptar el riesgo de un futuro incierto para el negocio. Animamos a todos los accionistas a acudir a la opa”, concluye DuCharme.
CCOO considera "imprescindible" que LetterOne tome el control de la compañía y que el actual consejo facilite esta transición
Por su parte, el Consejo de Administración de DIA se ha puesto a disposición de las partes y asegura que continuará trabajando con L1 Retail, las entidades financieras y sus asesores respectivos para cumplimentar los requisitos que competan o estén bajo el control de la sociedad, "con la máxima celeridad posible a la luz de los exigentes plazos a los que se enfrenta".
De la misma manera, seguirá trabajando "activamente" en las medidas que en su caso correspondan para que la compañía continúe atendiendo a sus obligaciones.
No obstante, desde el órgano liderado por Borja de la Cierva advierten que próximamente tomarán posición sobre la opa de LetterOne: "Con independencia de lo anterior, el consejo se pronunciará en el momento oportuno sobre los términos de la opa de conformidad con la legislación vigente".
Las exigencias de los sindicatos a Fridman
Con esta decisión se abre un nuevo panorama en el futuro de la compañía. Una cuestión fundamental a tratar será la gestión del ERE planteado por el Consejo de Administración, que podría afectar a 1.536 trabajadores.
Los sindicatos ya han dado su opinión sobre la victoria de la propuesta de LetterOne en la junta: "De la misma manera que Fridman ha exigido que no le obliguen a vender nada, CCOO exige que no despidan a nadie. Hoy han hablado la plantilla y la Junta de Accionistas de DIA, ahora es Mikhail Fridman el que tiene que pronunciarse".
Desde la agrupación sindical recuerdan que encima de la mesa de DIA hay un ERE planteado por un Consejo de Administración "al que hoy le han dado la espalda los accionistas" de la empresa, por lo que se pregunta si sería lógico mantenerlo.
La clave para este primer triunfo de Fridman ha estado en la baja participación de los accionistas, ya que el encuentro apenas ha contado con un quorum del 54,3% del capital
Desde CCOO aseguran que se abre un escenario nuevo, con nuevos directivos y con nuevas formas de gestión centradas en un plan de crecimiento para los próximos cinco años. "Esto no será posible sin la plantilla que hoy ha cerrado las tiendas y ha salido a la calle para exigir que se paralice el ERE, porque en DIA no sobra nadie", indica en un comunicado.
Para CCOO es imprescindible que LetterOne tome el control de la compañía y que se reúna con los representantes de la plantilla para explicar su plan industrial. "Es el momento de presentar propuestas para hacer de DIA una empresa viable y la única contraparte posible es aquella que tiene capacidad para tomar decisiones a medio y largo plazo", indica el sindicato.
Por ello, la entidad exige que el actual Consejo de Administración facilite que LetterOne tome el control y aboga por que en la mesa de negociación estén "las personas que tengan potestad real para tomar decisiones".
"Hasta que no se conozca cuál va a ser la estrategia de gestión de LetterOne se debe retirar el ERE, porque para negociar los despidos de miles de personas es exigible un mínimo de claridad de gestión y un planteamiento de viabilidad realista y de futuro", remarcan desde CCOO.