infoRETAIL.- Lidl ha presentado hoy su nueva sección ‘Listo para comer’, una gama de platos precocinados que pretende dar respuesta a los nuevos hábitos de consumo "que demandan sencillez, rapidez y buena relación calidad-precio”, según ha resaltado la directora de Relaciones Públicas de Lidl España, Arantxa Conde, durante la presentación de la nueva sección en el supermercado de la cadena situado en la Avenida de las Retamas, número 16, de la localidad madrileña de Alcorcón.
Este establecimiento, junto a otros tres situados también en la Comunidad de Madrid, han sido los elegidos para desarrollar este proyecto piloto que se incorporará a todas las nuevas aperturas del discounter alemán y que se extenderá a otras tiendas ya consolidadas en el trascurso del año 2020. En concreto, las otras tres tiendas que actualmente ya incorporan la nueva sección son las ubicadas en Pavones (Moratalaz), Avenida de San Pablo (Coslada) y García Noblejas (Ciudad Lineal).
La nueva gama, que se une a otros platos preparados con los que ya contaba Lidl, consta de 14 nuevas referencias, distribuidas entre platos fríos (seis) y calientes (ocho), “elaboradas artesanalmente con productos de proximidad”, tal y como ha querido destacar Conde, haciendo hincapié en “el valor diferencial” de este nuevo reto. La oferta de platos fríos, cuyo proveedor es la empresa catalana Bo de Debó, incluye albóndigas con salsa jardinera, ensaladilla rusa, croquetas de jamón ibérico, risotto, macarrones a la boloñesa y paella.
En lo que respecta a la sección de hot convenience, las novedades son referencias inspiradas en la comida americana donde se encuentran dos opciones de hamburguesas (cheeseburger y BBQ Beef Burger), nuggets, wraps (de carne y de falafel), chicken crispies y alitas picantes. Asimismo, cuenta con medio pollo asado “elaborado de manera artesanal”. Los precios de todos estos productos oscilan entre los 1,99 euros y los 2,99 euros.
Calidad y precios bajos
“Nuestra idea es ir ampliando el número de tiendas que incluyan esta sección, así como las referencias, dependiendo de la aceptación del proyecto”, ha anunciado Conde. Además, la empresa no descarta incorporar mesas para comer este tipo de platos dentro de los supermercados, tal y como hace Mercadona, aunque según ha explicado el responsable de Compras en la compañía de esta categoría, David Domene, “hay que tener muy en cuenta factores como el espacio”, destacando que “queremos seguir ofreciendo el precio más bajo siendo fieles a nuestra manera de hacer las cosas”.
El proyecto piloto se desarrolla, por el momento, en los supermercados madrileños de las Retamas (Alcorcón), Pavones (Moratalaz), Avenida de San Pablo (Coslada) y García Noblejas (Ciudad Lineal)
En cuanto a su disposición, los platos preparados se encuentran en una sección diferenciada en el lineal de cada una de las tiendas, ubicados en modelos de neveras y en estanterías con planchas calientes para conservar todas sus cualidades. Las novedades vienen presentadas en envases preparados para mantener el calor y la temperatura idónea para consumir en el momento. Además, en los paquetes, todos reciclables, están incluidas las instrucciones acerca de cómo se debe proceder al recalentado, o bien en el horno, o bien en el microondas.
Los platos de la sección caliente no permanecen más de cuatro horas en la estantería y, en caso de exceder ese tiempo, son devueltos a cocina en el punto de venta, "intentando evitar el mayor desperdicio posible", por lo que la compañía ha realizado un estudio para seguir "unas previsiones muy ajustadas". Así, la preparación previa, que se lleva a cabo en la propia tienda, se hace dos veces al día, pudiendo adquirir el producto a partir de las 12:30 y a partir de las 18: 00 horas, facilitando los momentos de consumo de comidas y cenas. Las bandejas frías, sin embargo, permanecen dispuestas en la sección de la nevera hasta su consumo.
El último informe de Kantar acerca del auge de la comida preparada muestra que cerca de 47 millones de usuarios recurren a este tipo de servicio al menos seis veces al mes, motivados por la relación calidad-precio y la comodidad. Además, el crecimiento del consumo fuera del hogar ha alcanzado el 10%, un dato que se hace relevante comparándolo con el retroceso del mercado de gran consumo del 1,8%, según los datos del informe de Kantar Media.