Análisis de la panificación en España

infoRETAIL.- El sector de la panificación especial envasada y etiquetada (pan de molde blanco e integral, pan tostado blanco e integral, multicereales, masa madre y otros formatos) ha registrado unas ventas de 955 millones de euros durante 2023, lo que supone un incremento del 10,5% respecto al año anterior.

Asimismo, las exportaciones han crecido un 17,8% el pasado ejercicio, alcanzando los 84 millones de euros, según los últimos datos extraídos del ‘Informe del sector del dulce en España 2023’ y del ‘Informe de Comercio Exterior’, elaborados por Produlce

A pesar de las dificultades y las limitaciones propias para la exportación, como los plazos de caducidad, este tipo de panadería ha logrado expandirse internacionalmente, gracias, en gran medida, a la amplitud de surtido y a la innovación en productos como los bagels o el pan brioche, que responden a la demanda de variedad, conveniencia o gamas más saludables, como las opciones integrales o los panes multicereales. De esta forma, consolidan su presencia en mercados clave como Francia (28,7 millones de euros), Italia (12,6 millones) y Portugal (12,3 millones).

El sector emplea a más de 2.500 personas de manera directa, lo que supone un crecimiento del 3,6%

Además, se ha registrado un crecimiento de triple dígito en Estados Unidos, Reino Unido y Marruecos, países que, aunque todavía cuentan con magnitudes muy bajas, muestran crecimientos interanuales importantes y, juntos, suponen casi un 14% del valor total de nuestras exportaciones en 2023.

El hecho de que las exportaciones hayan tenido un ascenso del 10% en volumen respecto a 2022, es una muestra del esfuerzo del sector por llevar la calidad del pan envasado español más allá de sus fronteras y demuestra el éxito de esta industria en su adaptación a las nuevas exigencias de los consumidores globales, según Produlce.

“La panificación envasada es mucho más que un alimento; es un reflejo de nuestra capacidad de adaptación a los retos en el mercado nacional e internacional y de la fortaleza de nuestras fábricas para resultar competitivas en nuestro mercado y en el exterior”, explica el secretario general de Produlce, Rubén Moreno.

Fuerte capacidad productiva
La panificación envasada es también un motor clave para el crecimiento económico, gracias a su fuerte capacidad productiva, que ha permitido abrir nuevos mercados internacionales. En los últimos años, se ha pasado de importar más de lo que se exporta a revertir esta tendencia, consolidando un superávit comercial que crece con fuerza en cada ejercicio. Este impacto positivo se da por dos vías: en primer lugar, la balanza comercial crece y, en segundo lugar, la producción nacional es cada vez más protagonista en los lineales de nuestros supermercados.

Esta potente fabricación nacional ha permitido que cada vez más empresas de esta industria abran nuevos mercados internaciones, consolidando su presencia en el exterior y generando nuevas oportunidades de empleo estable y de calidad en España, especialmente para mujeres y jóvenes. En concreto, y a pesar del incierto contexto de los últimos años, el empleo en la categoría suma un nuevo incremento en 2023 (+3,6%), situándose en casi 2.500 empleados directos.

La estabilidad se instala ya en una cifra del 87%, viéndose especialmente beneficiado de este efecto el colectivo de trabajadores jóvenes, que, además de mejorar su participación en dos puntos porcentuales (14%), ganan estabilidad, con una mayoría de contratos indefinidos (53%), frente al 44% de tan solo un año antes. Según los datos más recientes de Produlce, la gran mayoría de los empleos directos generados por la industria de la panificación envasada se encuentran en zonas rurales, contribuyendo de manera decisiva al equilibrio territorial y a la sostenibilidad económica de estas regiones.