Sistema de etiquetado Nutri-Score

infoRETAIL.- El Parlamento Europeo ha frenado la implantación del sistema de etiquetado Nutri-Score en un debate sobre 'La influencia y el control sobre las elecciones de supermercados de los ciudadanos europeos' organizado por el eurodiputado español Jordi Canas (Ciudadanos) y el grupo de expertos Competere.eu. 

Los participantes, procedentes del ámbito de la nutrición, pymes y asociaciones de consumidores, han discutido sobre la aparición en el frontal de los paquetes de alimentos de este etiquetado nutricional.

Para el fundador de Competere, Pietro Paganini “representa el pasado porque la ciencia se está moviendo en la dirección de las dietas personalizadas” y que, en su opinión, “cambia en función de los intereses políticos o comerciales” surgidos en torno a los distintos productos.

“La salud, y el cuidado de la salud es totalmente personal e individualizado”, sostiene el catedrático de la Universidad de Barcelona Ramón Estruch, que aboga por la búsqueda de soluciones individualizadas para cada ciudadano frente a la unificación que propone Nutri-Score, que "se enfoca en lo que es malo en un alimento; el algoritmo calcula su calificación, otorgando un 40% de peso a los efectos negativos de un alimento y solo un 15% a los efectos positivos”, explica el profesor.

Testar antes de implantar
Por su parte, el eurodiputado del Parlamento Europeo y ponente de la estrategia de la UE de la granja a la mesa, Herbert Dorfmann, califica a este sistema de etiquetado como “demasiado simple” al cometer lo que para él son “errores evidentes” al aventurarse a proclamar lo que es saludable. “Qué es sano, cómo se define y quién o qué entidad lo define es un asunto, cuanto menos, complicado”, declara.

Por este motivo, Dorfmann recomienda, que, antes de hacerlo extensivo a Europa, Nutri-Score sea evaluado por su resultado sobre los efectos en la salud del consumidor en los países (Francia, Bélgica, Alemania) que ya lo han introducido en su plan nutricional nacional. 

Para el eurodiputado, Nutri-Score concede a las cadenas de distribución de supermercados un poder del que se puede abusar para influir en las decisiones de los consumidores. “Es un sistema en interés del sistema de distribución y eso es un problema”, concluye Dorfmann.

En este punto, el grupo de expertos conservador New Direction apuesta por la libre coexistencia en el mercado de los múltiples modelos nutricionales existentes; mientras que, desde SME Europe, las pymes europeas plantean que el coste ocasionado por la reformulación de recetas para lograr un mejor Nutri-Score “podría no satisfacer al cliente y agravarían la actual crisis financiera” a la que se enfrentan. “No es el momento de hacer más difícil la vida de las pymes y arriesgarse al populismo”, concluye el eurodiputado griego Giorgios Kyrtsos.