Persona con ordenador

infoRETAIL.- Esker, fabricante de soluciones de automatización de procesos en modo cloud, ha cerrado el primer trimestre del año con unos ingresos de 28,2 millones de euros, lo que representa un incremento del 16% respecto al mismo periodo del ejercicio pasado, en función de los tipos de cambio constante (+17% basado en los cambios actuales).

La actividad basada en la nube se mantiene como el principal negocio del grupo, representando el 92% de las ventas totales. Entre enero y marzo, ha registrado un crecimiento interanual del 21%. La actividad ha sido particularmente importante en América (36% de los ingresos mundiales en la nube) con un repunte cercano al 30%. Por su parte, la región de Asia-Pacífico ha crecido un 50% en el primer trimestre y representa el 6% del negocio de la compañía.

Los productos históricos y las soluciones en modo licencia continúan estabilizándose a favor de las implementaciones basadas en la nube, con unos ingresos trimestrales valorados en 1,5 millones y 0,6 millones de euros, respectivamente.

A 31 de marzo, el efectivo del grupo ascendía a 24,1 millones de euros. Con 19,9 millones de euros en efectivo neto, un 17% más que en 2019, la compañía asegura que cuenta con los recursos financieros necesarios "para abordar con serenidad este complicado período y seguir con su estrategia basándose principalmente en el crecimiento orgánico".

La actividad basada en la nube se mantiene como el principal negocio del grupo, representando el 92% de las ventas totales. Entre enero y marzo, ha registrado un crecimiento interanual del 21%

En este sentido, a pesar de la actual crisis sanitaria global, Esker continúa sirviendo a sus clientes sin que repercuta en la calidad del servicio prestado. Casi todos los empleados de la compañía están operativos y trabajan desde casa, independientemente de su ubicación.

Los ingresos por ventas de Esker incluyen una participación variable que depende del nivel de actividad de los clientes en sus plataformas. Esta parte representa el 45% de los ingresos de la compañía. La desaceleración económica resultante de la pandemia afectará el crecimiento de estos ingresos. Para el mes de marzo, este impacto negativo se estima en 2,7 puntos de crecimiento.

Esker recuerda que mientras que algunas industrias se ven muy afectadas (por ejemplo, transporte, turismo, etc.), otras ven aumentar su actividad, a veces significativamente (por ejemplo, productos farmacéuticos, equipos médicos, alimentos, etc.). "En este contexto, Esker debería beneficiarse de la fuerte diversificación de su base de clientes, ya que nodepende de un sector económico específico", remarca el grupo.

Hasta la fecha, la compañía destaca que la gran mayoría de los proyectos de los clientes se llevan a cabo de forma remota sin ninguna desaceleración notable. En el primer trimestre, los ingresos de las actividades de consultoría para soluciones basadas en la nube han aumentado un 27% en comparación con 2019.

El valor de los proyectos firmados y aquellos en proceso de implementación sigue siendo alto y representa más de cuatro meses de actividad. En el primer trimestre, Esker ha continuado firmando nuevos contratos a un ritmo similar al de los trimestres anteriores.

"La crisis de salud alargará los ciclos de ventas, al menos durante el segundo trimestre de 2020", indica la firma, que avanza que los efectos de esta desaceleración dependerán principalmente de su duración y del dinamismo de la recuperación posterior. En el contexto actual, destaca el interés de las empresas por tener soluciones de automatización de procesos de back-office basadas en la nube.

Previsiones favorables
Desde Esker indican que los efectos reales de la situación económica actual sobre su cifra de negocio dependerán de la duración de la crisis. "Para afrontar este período, Esker confía en la resistencia de su modelo económico, la diversificación geográfica y sectorial de sus ingresos y la relevancia de sus soluciones para los clientes", indica.

A pesar de las incertidumbres sobre la evolución de la crisis, Esker espera mantener un crecimiento orgánico cercano al 10% en 2020. Así, la rentabilidad sería similar a la registrada en 2019, sin que afecte a las inversiones destinadas al desarrollo del grupo en los próximos años.